POR NANCY GARCÍA
Para LAD Vuelvo a la distancia que nos contiene a ti y mí como dos sueños de agua Vuelvo a la ansiada soledad de mi casa sintiendo el pecho como un campo abierto en el que esta primavera florecerán semillas de ámbar Vuelvo a ciudad que sin ti parece deshabitada llevándome fotografías de tu infancia colgadas en los muros de mi memoria blanca
Te digo El ámbar flota como los ahogados en el mar El ámbar es una gema una resina semipreciosa una lágrima de lo ancestral Un ahogado es un delirio una isla abortada en el cielo negro de nuestros vicios Tú dices Aquí no hay ámbar Lo que flota son las luces de nuestro destino Nubes rojas que van borrando caminos
La voz pierde el sinónimo para lo negro es vuelo precipitado espuma rabiosa rayadura en la planicie que insiste en pronunciarse silbido apenas lamento o isla parlante Aguda vértebra que llena de espinas el sitio para imaginar la caída de la lengua madre
Volver a la grieta que reclama de nosotros los besos hijos de sangre Llorar la semilla del nombre que nos convoca en esta madrugada caída de mantos y de mujeres que duermen para no despertarse Desear que se despeñe el vaso para que las lágrimas derramadas perfumen la nuca callada de esta página oscura
Una forma callada del odio Una costra de agua negra Un sarpullido violento en la sangre Una bola de larvas hirviendo en la lengua Un hilo filoso que rasga la piel del habla Es la escritura devolviendo al pájaro extraviado el nido para sus huesos cansados Un rito que recupera el balbuceo que nos robó la tierra
Nancy García Gallegos (Aguascalientes, 1983). Es poeta, crítica de arte y literatura, tallerista y practicante de poesía sonora. Actualmente estudia el Doctorado en Literatura Hispanoamericana (BUAP) y coordina talleres enfocados en el desarrollo de procesos creativos para la escritura.