INTERFERENCIAS EN LA RADIO DE KYN TANIYA

POR CÉSAR GARCÍA GÓMEZ

Aunque ahora la radio no parezca un elemento novedoso, sí lo era en la década de 1920 cuando llegó a México. La fascinación por este medio desembocó en varias obras entre el grupo de los estridentistas, también de formación reciente. Entre ellas se encuentra Radio. Poema inalámbrico en trece mensajes (1924) de Kyn Taniya, pseudónimo de Luis Quintanilla del Valle. El poemario se compone de trece textos que constituyen, en conjunto, una propuesta de transmisión radiofónica, que el lector puede “escuchar” al leer cada una de las composiciones. El subtítulo de la obra anuncia su carácter vanguardista, pues no se trata de una colección de poemas, sino de un poema integrado por “trece mensajes”. Cada uno de estos textos —a excepción del primero— recibe un título que lo individualiza del resto, con lo cual se tiene un texto unitario, aunque dividido en pequeñas secciones, en las que el elemento “inalámbrico” está siempre presente.

En este sentido, destaca la interferencia constante que se explicita en el poema a través del empleo de las letras mayúsculas. El primer mensaje, de corte elegiaco, parte de elementos intertextuales con la liturgia católica para abrir la ruta auditiva hacia el resto de las composiciones:

Padre mío
que estás en los cielos
¿desde allá arriba no se oye el dolor?

La interpelación al padre se despliega en dos sentidos, pues, por un lado, Radio está dedicado a Luis Quintanilla, padre del poeta, y, por otro lado, el elemento intertextual permite suponer que se trata de una reconfiguración paródica dirigida a Dios. El cierre del texto es igualmente significativo ya que introduce un primer elemento de interferencia:

Asciende lentamente
verticalmente
y por favor deja una estela
¡PARA QUE YO TE PUEDA SEGUIR!

Esta última frase puede interpretarse también en dos sentidos. Primero, como un elemento enfático, debido al empleo de los signos de exclamación y de las mayúsculas. Segundo, como un elemento de interferencia, captado por la radio que se escucha —el poema— y que se inserta de manera coherente con el resto del mensaje. Esta interpretación se sustenta al tener en cuenta la totalidad de las composiciones de Radio, en particular aquella llamada “…IU IIIUUU IU…”. En ésta, pueden leerse frases aparentemente inconexas, todas escritas con mayúsculas y a renglón seguido, como se observa en el siguiente fragmento:

ÚLTIMOS SUSPIROS DE MARRANOS DEGOLLADOS EN CHICAGO ILLINOIS ESTRUENDO DE LAS CAÍDAS DEL NIÁGARA EN LA FRONTERA DE CANADÁ KREISLER RISLER D’ANNUNZIO FRANCE ETCÉTERA Y LOS JAZZ BAND DE VIRGINIA Y TENESÍ […]

Si bien no existe una conexión semántica entre las frases, los últimos versos de la composición sugieren que aquello que se ha leído comparte la cualidad de fragmento radiofónico. El lector, así, gira la perilla del aparato y escucha mensajes diversos provenientes de lugares lejanos:

Todo esto no cuesta ya más de un dólar
Por cien centavos tendréis orejas eléctricas
y podréis pescar los sonidos que se mecen
en la hamaca kilométrica de las ondas

La propuesta de Radio, como poema en mensajes, se replica en esta composición; a lo cual se añade que el título mismo, “…IU IIIUUU IU…”, escrito también en mayúsculas, parece hacer referencia al ruido característico de la interferencia radial.

Este texto permite ver con otra mirada los fragmentos en mayúsculas incluidos en otras secciones. Así, en el segundo mensaje, “Midnight frolic” —cuyo título remite al espectáculo teatral de Florence Ziegfeld Jr.—, el lector atiende a un espacio auditivo y visual en el que tiene lugar la fiesta de las estrellas:

Esta noche
al ritmo negro de los jazz-bands de Nueva York
la Luna bailará un fox-trot

¡SI LA LUNA Y JÚPITER Y VENUS Y MARTE
Y SATURNO CON SUS ANILLOS DE ORO!

Las mayúsculas, como en la oración que abre Radio, se integran de manera coherente en el discurso —por lo menos en el aspecto semántico—, pero no por ello dejan de ser una interrupción, una interferencia que se cuela entre los versos del poema. Esta característica se enfatiza pues se trata de una frase sin verbo, de una oración incompleta que, como interferencia, llega de manera fragmentaria y disruptiva.

En el último mensaje del poema, llamado “Alba”, también puede observarse este empleo de las mayúsculas. La composición establece un contrapunto respecto de “Midnight frolic”, pues, frente al ambiente nocturno de éste, “Alba” indica el momento de llegada de la luz del sol:

Peces opiómanos
de la Bahía de Cantón
se despiertan

La composición retoma también algunos elementos planteados en el primer mensaje del poema. Así, frente a la oración de tono personal dirigida al padre, se encuentra aquí una apelación general a “las almas”:

Las almas
caminan sobre el río
para no tocar el polvo con los pies

Sin embargo, este amargo amanecer es interrumpido por una voz emergente que se impone momentáneamente:

LA BOCINA ESTÁ YA RONCA
DE GRITAR COSAS DISTANTES
y las frívolas antenas
gozan eléctricos espasmos de frescura

Como en las composiciones anteriores, las mayúsculas evocan una interferencia en la transmisión; no obstante, esta vez la interrupción hace referencia al propio medio en el que se han difundido los mensajes y explicita el fin de la comunicación. La frase en mayúsculas destaca, no sólo visualmente, pues dota de cualidades humanas a esta bocina que está ronca —acaso cansada— de tanto gritar.

Las interferencias en Radio. Poema inalámbrico en trece mensajes, de Kyn Taniya, son sólo un pequeño detalle por explorar en la obra. En este recorrido ha podido advertirse cómo el empleo de las mayúsculas constituye un elemento formal que, además de enfatizar los contenidos, expresa voces provenientes de otros mensajes y ayuda a crear el ambiente radial que domina la propuesta del poema. A casi cien años de su publicación, Radio es una obra breve, pero sugerente, que vale la pena revisitar y releer como homenaje al autor y a su grupo, faceta indiscutible de la vanguardia mexicana.

César García Gómez. Actualmente cursa el Doctorado en Literatura Hispánica en El Colegio de México. Ganador del Premio Joaquín García Icazbalceta 2019 por su trabajo La historia textual de Musa Callejera de Guillermo Prieto: consideraciones hacia una fijación para su edición crítica. Sus líneas de interés son la crítica textual, la edición de textos y la literatura mexicana.