POR MARÍA ELENA LORENZIN
Cuando vio a Katherine posar para los fotógrafos, Samuel no pudo creerlo. Allí estaba ella vestida de novia, rodeada de empleados de la tienda en el preciso momento en que, tomando una tetera que estaba a la venta, simulaba servir el té a los presentes. A su lado, el supuesto novio parecía incómodo, como si quisiera deshacerse de toda esa turba de curiosos que lo enceguecían con los flashes de sus teléfonos inteligentes.
La idea de Katherine de casarse en el centro comercial no sorprendió al futuro esposo. Él sabía de su adicción a las compras y pensó que sería un buen lugar para consentirla. Samuel volvió a mirarla para constatar que no era una visión surrealista sino la mismísima Katherine que lo había dejado por otro unos meses atrás. Sin pensarlo dos veces, Samuel llegó hasta la pareja, agarró a Katherine y, a pesar de su resistencia, gritos y pataleos, la llevó en brazos por un buen trecho hasta encontrar un carrito de compras y meterla dentro. Casi sin aliento llegó a la caja del self service y pasó rápidamente el carrito por el escáner. Fue una verdadera ganga, la oferta del día que nadie pudo cuestionar.
María Elena Lorenzin (Argentina-Australia, 1943). Ha publicado dos libros de microrrelatos: Microsueños (2008) y Parricidio (2018). Sus textos han sido recogidos en múltiples antologías y revistas literarias. Es miembro fundadora de REM, Red de Escritoras Microficcionistas.
