PECADO, ENCADENADOS, TAL VEZ YA NO TE QUIERA | POR BEATRIZ PÉREZ PEREDA

Pecado

Aunque sea pecado
te quiero, te quiero lo mismo
y aunque todo me niegue el derecho
me aferro a este amor

Pecado, Carlos Bahr. 
En voz de Caetano Veloso

El secreto perfecto 
el camuflaje de la indiferencia
como los adolescentes que nunca fuimos juntos: 
                     te desprecio para esconder mi amor 

Singularidades 
accidentes en la carretera del tiempo 
como un cometa
                           un avistamiento cada año impar o bisiesto 
lo que dure el alimento de la luz 
la creencia en ella 
hasta volver a colmarme de la llama y el vértigo
que basta para soportar la espera 

El secreto perfecto
puesto con descuido a la vista
como un solitario guante 
dejado en una mesa cualquiera
para que nadie lo desee
Poner un bozal a la mirada
contar los segundos correctísimos 
que deba durar tu mano en mi mano 

¿Será amor si no hay función para el aplauso?
¿Será amor si no deja huellas?
¿Será amor si el miedo al basta es más pequeño que a decir aquí estoy?

El secreto perfecto 
pecado que no se resigna 
porque ya pagó su penitencia




Encadenados

Una selva
                  un desierto 
                                       nieve de por medio 
los kilómetros a otras formas de distancia convertidos 
las hojas de un otoño imposible
sólo verdadero en esa fotografía 
que en mi debilidad observo 

Correos con horarios de vergüenza 
llamadas que llegan antes o después del llanto 
No un hilo rojo: 
una cadena larga e invisible 
amarrada al cuello de un galgo amor 
que sólo conoce el cautiverio 

Una cadena que se revuelve iracunda cuando el deseo la tensa 
que hace llagas en domingo 	
fría y cruel en el invierno entre una llamada y otra 
Transparente a los demás 
goteando el plomo de su peso en mi corazón 
El deseo de huir es proporcional 
a la adoración a la cadena
¿Seguiremos siempre igual?

Encadenados
y bien se sabe
toda cadena tiene un prisionero 
en cada extremo  



Tal vez ya no te quiera
me lo pregunto mientras leo ese poema que le escribiste a tu amor y publicas cada 14 de febrero y tus entusiastas lectores comparten porque sí ahora puedo verlo objetivamente es un gran poema y la poesía se alarga en cada una de sus promesas Lo miro ahí en el contraste blanco de la pantalla y soy como ese fondo una luz insípida que dice: —Mira, si yo tuviera un amor, le dedicaría ese perfecto poema… El poema y soy una luz sin emociones sin matices como esos libros donde nada palpita Tal vez ya no te quiera me repito mientras busco un defecto en tus palabras Tal vez ya no te quiero y sonrío aunque esté roto el juramento de no escribirte otro poema

Beatriz Pérez Pereda (Villahermosa, 1983). Ha obtenido el Premio Iberoamericano Bellas Artes de Poesía Carlos Pellicer para obra publicada 2023 y el Premio Nacional de Poesía Carmen Alardín 2022, entre otros. Sus libros más recientes son: Persona no humana (CONARTE, 2022) y Crónicas hacia Plutón (ITAC, 2022). Imparte talleres de lectura y escritura, entrevista a autores para el suplemento cultural La Gualdra y tiene cuatro perros y un gato.